Como
este año hemos sido muy buenos chicos sus majestades de oriente nos
han traido de regalo una segunda PEC de Historia antigua, aquí os
dejo el documento gráfico que tenemos que comentar, un tretradacma
(460-450 a.C. - Atenas).
A)
Describa el documento gráfico (lo que ve en él).
En
la imagen observamos los dos reversos de una moneda, presumiblemente
de plata, en el que en uno de ellos vemos el perfil de una diosa
coronada con hojas de olivo, y en el otro un buho o lechuza, también
con hojas de olivo y la inscripción “A TH E”.
B)
Haga una relación de (ponga uno detrás de otro) los aspectos
sobre los que proporciona información.
En
la imagen nos presenta un tetradracma, del 460-450 a.C., Ateniense,
donde se observa en el reverso izquierdo la imagen de Atenea, diosa
protectora de la ciudad, coronada por hojas de olivo, considerado
árbol sagrado de la ciudad, y en el derecho la leyenda “A TH E”,
naion, y una lechuza, como ave que anida en el olivo, como
símbolo de la ciudad, y una ramas de olivo, símbolos de la ciudad
de Atenas como símbolo para difundir su imagen.
C)
Relaciónelo con los contenidos de la asignatura con los que
le parece que guarda mayor relación.
Desde
su origen, la concepción de moneda viene dada por una determinada
cantidad de metal garantizado y reconocido por una autoridad
competente. Se acuñan las primeras en las ciudades jonias de
la costa de Asia Menor (650-600 a.C.), de electrón,
aleaciones de oro y plata.
Originalmente
no era necesaria el uso monetario para las transacciones comerciales,
bastaba con tener una noción de propiedad, similar al trueque, la
parte que posee el bien que quiere vender le asigna un precio que el
comprador adquiere pagando ese precio establecido, o bien por
referencia de otros objetos comunes o mediante un bien a disposición
del comprador y que sea aceptado por el vendedor. El origen de la
moneda griega vienen, por un lado, por las pepitas de metales
preciosos, y por otro, de los pinchos con los que se atravesaba la
carne para asarla sobre el fuego, el obelós. Las primeras
formas era una cierta cantidad de metal valioso con un cuño que
garantizaba el peso y la cantidad. Del obelós proviene el
nombre del óbolo, o fracción del dracma, drax,
que era la unidad monetaria griega, se suponía que los óbolos se
empleaban en las ciudades griegas antes de disponer de monedas, y las
seis unidades que conformaban un dracma, marcadas por las seis partes
en las que era divida ritualmente la víctima sacrificada y
consumida en común de manera equitativa, inherente a las
transacciones comerciales, mediante el cual consiguen expresarlo.
Tanto en Creta como en Chipre y en las ciudades de Asia Menor, el
origen de la moneda procede del uso de medio de pago mediante pepitas
y lingotes de metales preciosos. El paso definitivo se dió cuando
las distintas ciudades deciden plasmar su identidad en el metal y de
esta manera difundir su imagen.
La
evolución de medio de pago en el mundo griego fue muy compleja, en
la época Micénica se utilizaban lingotes de bronce y pepitas
de oro y plata al peso. Durante los “siglos oscuros” se acuñan
las primeras monedas, que no estaban destinadas a prácticas
comerciales, si no religiosas, depositándose en los Santuarios,
usadas como presentes de intercambio, premios de carreras o medio de
rescate de cautivos.
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